El bar Bonobo ボノボバー
Una burbuja de jazz
En el corazón de Harajuku, escondido tras una cortina transparente y una pesada puerta de madera se encuentra el bar de cócteles más pequeño de Tokio.
Entras al bar Bonobo y ves las barras adornadas con frutas frescas, unos pocos taburetes, escuchas música alternativa. Este pequeño bar es el lugar perfecto para comenzar la noche. Aquí te olvidas del mundo. El bar pone varios tipos de música con mezclas muy bien hechas, desde electro, hasta disco. También puedes encontrar esquinas tranquilas para relajarte.
El primer piso es todo de madera y con mullidas alfombras (hay que quitarse los zapatos). Hay una pequeña biblioteca donde puedes ojear revistas viejas de rock o arte pop japonés o simplemente dejarte llevar por los aprendices de DJs que vienen a practicar.
Si el clima lo permite también puedes disfrutar de una terraza al aire libre rodeada de plantas por todas partes. Ocasionalmente se hay barbacoas y se asan takoyaki (bolitas de pulpo). Tanto en el sótano como en la terraza suele haber música en vivo o live painting, si el espacio lo permite.
Las bebidas cuestan alrededor de 600 yenes (500 yenes la cerveza, 600 yenes una copa de vino, 700 yenes un highball (mezcla de whisky y ginger ale). También puedes comer dulces y pasteles del día. Es interesante observar el público, en su mayoría japoneses, que se compone de jóvenes (y no tan jóvenes) excéntricos que vienen a disfrutar de la buena música y el ambiente relajado de Bonobo.