El mercado Hozuki ほおずき市
46.000 oraciones en un día
Pragmatismo y religión son dos cosas que los japoneses saben fusionar alegremente. Un ejemplo es el mercado Hozuki que está relacionado con la fiesta budista de Shimanrokusen-Nichi y se celebra todos los 9 y 10 de julio en el templo Senso-ji.
Hay una leyenda entorno al mercado Hozuki. La historia escuchada por primera vez durante la era de Edo (1603-1868) dice que si un fiel va a orarle a la Bodhisattva Kannon (diosa de la misericordia) el 10 de julio, su oración equivale 46.000 oraciones, es decir, ¡más que toda una vida de rezos! Es así que este día es llamado shimanrokusennichi (四万六千日) que simplemente significa 46.000 días. Esto también significa que si se pide un deseo ese día, este se multiplica por 46.000. Naturalmente, los templos dedicados a Kannon atraen a miles de visitantes cada año en este día en particular.
En Tokio en el famoso templo Senso-ji en Asakusa (el templo más antiguo de la capital construido en 628 para recibir una estatua de la diosa Kannon), este festival budista se combina con un animado y colorido mercado, el mercado Hozuki. En el período Edo, los hozuki (physalis, o uchuva), plantas de aspecto un tanto extraño, se utilizaban con fines medicinales. Los fieles estaban seguros de que su poder curativo se multiplicaría en este día auspicioso.
Desde entonces durante estos dos días en julio más de cien puestos venden uchuvas, estas lindas plantas con frutos color rojo-naranja y con forma de lámpara. Se puede comprar en macetas, en la rama, o ya arregladas en pequeñas cestas de mimbre. También venden furinas, una especie de carrilón de viento hecho de vidrio que los japoneses cuelgan bajo el alero de sus casas y cuyo tintineo trae frescura.
Tradición
Y como es típico en la mayoría de los matsuri (fiestas tradicionales) hay muchos puestos de comida y un parque infantil. Puedes aprovechar para degustar los okomiyaki, takoyaki y otros platos típicos. Para celebrar aún más este evento de verano, muchos visitantes se pasean por el mercado vistiendo sus yukata. ¡El verano ya está aquí!