En Bon Shya 梵恩舎

Detrás del mostrador, para comunicarse con sus clientes Takeshi pasa del francés al inglés, y luego al japonés. Hablar varios idiomas es una ventaja aquí en la montaña sagrada de Koya, donde vienen miles de turistas japoneses y extranjeros todos los años. Pero también es un hábito para el propietario del local que vivió en París y viajó por Europa antes de establecerse aquí con su esposa francesa, en la calle principal que serpentea entre los muchos templos en Koyasan.

Y como en todos estos templos el menú de Bon En Shya es 100% vegetariano: sirven una hojin-ryori (cocina vegetariana budista) que es abundante y sabrosa, y a precios asequibles. El menú del día puede incluir arroz (nunca falta) fricasé y ratatouille de verduras (con tomate), por supuesto tofu recién preparado (esta es la especialidad de Koyasan) y tsukemono  (verduras marinadas).

Bon On Shya también ofrece una buena selección de tés (negro, chai, de hierbas) y de cafés (expreso, con leche, capuchino) para calentar a los valientes que asistieron a las oraciones del amanecer. También ofrecen una merienda con deliciosos dulces caseros.

En el comedor también exponen y venden pinturas de Véronique y las hermosas cerámicas de los hornos de Koyasan, por ejemplo, piezas únicas por Yoshinori Mitsuboshi, un artesano local que ha estado horneando la tierra de la montaña sagrada por más de 30 años.