Si la Madre Naturaleza tuviera que hacer una aparición en la cocina de un restaurante, elegiría el No No Budou. Un lugar donde el producto de excelente calidad es el rey.
Desde las ostra hasta los okonomiyaki, pasando por un bufé con productos orgánicos, un restaurante de tofu y pastelería gourmet, Hiroshima nunca deja de sorprender el paladar.